El Ego,criticas y habladores.

Estimados Sensei maestros, judocas y artistas marciales.

Leyendo hoy un escrito, del Sensei Fernando A. Cartofiel, sobre el Ego y los que critican y hablan de otros, maestros. Le pido permiso para agregar. Llénalo, con respeto, cooperación y ética como señala el Bushido.

Pensé que en el Judo ya sea en su modalidad Deportiva o Tradicional, como objetivos, debemos tener el desarrollo y la educación de sus practicantes, basando su formación en principios y valores.

Tu filosofía tiene que comenzar por la aplicación del respeto y desarrollo mutuo.

Es por eso que los mediocres no triunfaran porque les falta vocación, voluntad y principios, ellos nunca serán buenos judocas. Artistas marciales, ni excelentes personas.

Hace un par de día, conversaba con un Sensei y me decía:  Maestro, usted se ha puesto a pensar, la imagen que nos dan a nosotros y a nuestros discípulos aquellas personas que hablan mal de los demás sin recato, sin respeto ni compasión. En verdad eso es muy deplorable. Y si lo hacen por adulonería o lambonear aun peor.

Tenemos que enfrentar esos individuos que algunas veces están en nuestro entorno o en nuestras escuelas. Ellos en realidad, lo que hacen es, crear un clima negativo.

Y me pregunto el Sensei y amigo: ¿esos para qué nos sirven?

La conversación se interrumpió por la salida de su avión, pero esta es mi respuesta.

Después del comentario en buen cubano quedé enclochado y comencé a investigar sobre el tema.

Según leí y converse después con mi asesor privado el Dr. Ricardo Humaran, psiquiatra de profesión y me comento: esos individuos, solo sirven a sus intereses personales.

Los que acostumbran a hablar mal de otros, siempre lo hacen con un solo objetivo, el de querer sobresalir, lucir como un juez o un sabio, buscando destacarse y muchas veces diciendo unas verdades a medias, para justificar o enmascarar mentiras, su propia opinión y criticas substantivas. Esa conducta es parte de su mediocridad.

Y yo no recuerdo en todo lo que he podido leer hasta el día de hoy que el Sensei.

Jigorō Kanō, criticara o hablaba mal de otros maestros u otros estilos. Él trataba de aprender siempre de todos y de unirlos a su escuela y en otros casos buscaba la forma de apoyarlos para que desarrollara la suya.

En la historia del Shijan Jigorō Kanō hay muchísimos ejemplos para mencionar, comienzo por decir, él creo, dentro del Kodokan. El Instituto de Estudio de otras artes marciales tradicionales llamado KOBUDO KENKYUKAI, como una posibilidad más de aprender y apoyar. Con la participación de maestros de otras artes marciales y diferentes estilos dentro del propio Kodokan.

Otro destacable, ejemplo fue con los Maestros Ueshiba de aikido y Funakoshi de Karate que casualmente este último, uso un judogi prestado por el Maestro Kanō en su primera presentación en Tokio. Debido a la poca estética del uniforme del karateka. Entonces Kanō le recomendó usar su judogi en su presentación y ese apoyo fue útil y después lo asumió, con ciertas modificaciones para el karate. Esa debe ser la conducta de un Sensei y un maestro del judo, ya sea Olímpico o tradicional.

Si observamos cada vez que se habla mal de alguien o de algo, lo hacen la mayoría de las veces de manera muy subjetiva y sin tener evidencias claras u objetivas, de lo que dicen, u opinan de la otra persona. Siempre se refieren a lo que dijo otro, o por lo que imaginan. Como si ellos fueran dueños de la verdad y un Mesías.

Hablar mal de los demás es crear división, recelos, es enrarecer y perjudicar el ambiente de las instituciones, la familia y la profesión.

Los chismosos y los envidiosos, elimínelos de tu entorno, hay que salir a su paso y enfrentarlos, no le hagas taisabaki, ¡derrotarlos!, no dejes que contaminen al resto con su veneno y mediocridad.

La subjetividad y el chisme, son un arma nociva y letal. Esa es la que ellos aplican cuando un hecho se distorsiona para herir, ofender, lastimar o acabar con la reputación de alguien que les molesta o les estorba.

Algunos tristes personajes, (mira a tu alrededor y siempre verás alguno) les gusta minimizar y no reconocer los méritos y logros que tienen otros. Ellos prefieren ser tuertos, para ver a otros que envidian ciegos.

Un Sensei, un Maestro no puede participar ni permitir eso, hay que enfrentarse por ética. Aunque algunos lo consideren grosero o de mala educación para su gusto, la verdad se hizo para decirla, y la verdad tarde o temprano siempre resurge.

Queridos judocas, lo subjetivo es parte de nuestras opiniones y si no es verificable peor. Inclusive, dentro del concepto de muchos que equivocadamente alegan que expresarse así sin evidencias y actuar así, es parte de la libertad de expresión; ¡ESO ES SOLO UNA GRAN  MENTIRA!

Por eso para hablar de otro hay que tener y mostrar evidencias.

A veces muchos de esos individuos se molestan por no tener los conocimientos de alguien o porque esa otra persona recibió un galardón, un premio, un diploma o una constancia.

La verdad se demuestra cuando los hechos son captados en una fotografía o una grabación, y se convierten en algo objetivo, verdadero y sea irrefutable.

Es digno de comentar que muchas veces cuando algunos no logran triunfar en una posición o lugar y regresan derrotados a donde salieron.

Si otro triunfa, donde él fracasó, entonces el despecho, la envidia, los celos profesionales o la falta de ética. Le llevan a denigrar del triunfador y de su éxito. Incluso llegan a poner en duda la legitimidad y procedencia de la organización, donde su ex amigo que si triunfo. Lamentable esas cosas suceden y nos han pasado a muchos de nosotros, es la verdad.

CONCLUSIONES

La subjetividad suelen disfrazarla.

Las mentiras, la falsedad, el embuste, y el chisme, después de dicho y afirmado, hacen mucho daño a la reputación. Y ese mal que te hacen después de hecho, permanece por tiempo indefinido lastimando y dejando en la otra persona una marca muy difícil de borrar.

Todo lo anterior es muy lamentable, por eso mejor seguir el ejemplo del Sensei Jigorō Kanō.

Ojala coincidan conmigo.

Muchas gracias.

Pedro Chirino Rentería.
Rokudan USTKJ/UPJ

Este y otros artículos pueden ser vistos en el blog Judo y Jujutsu vida en movimiento.