Taiho Jutsu.

El Taiho Jutsu es un Arte de Defensa Personal, es el sistema de trabajo policial Japonés y se le conoce por “el Arte del Arresto y la Detención”. Etimológicamente hablando Tai significa “cuerpo” y Ho significa “control”, por lo tanto literalmente traducido seria “someter un control al cuerpo”, policialmente hablando “arresto y/o detención” y Jutsu significa “Técnica”.

El Taiho Jutsu es un término para las Artes Marciales que define un sistema de trabajo para la Policía, creado en 1947, y que fue el resultado de un consensuado estudio por parte de un Comité de Maestros de Karate Do, Judo, Aikido, Jo Jutsu y Kendo, los cuales rediseñaron los pilares y premisas a seguir en el desarrollo del Yaku Kobuyutsu, que fue el sistema originario de la primera policía japonesa, este arte ha seguido evolucionando gracias a la lógica de su creación, es decir, fue creado para la Policía y de ahí que en la actualidad se siga trabajando en para la intervención policial seleccionadas de cada uno de los estilos anteriormente nombrados, originando programas específicos para la formación de la policía japonesa, en estos programas se incluyen técnicas a mano vacía “Toshu” y “Atemis”, técnicas de estrangulaciones “Shime”, técnicas de bastón “Keibo”, técnicas de engrilletamientos “Te-jou”, con grilletes “Seijo” y técnicas de control “Taiho”, técnicas de inmovilización “Osae” y técnicas de cacheo y conducción”Hikiate-Oyobi”.

En el antiguo Japón, una vez finalizada la “Era del Samurai”, en la que los señores de los distintos feudos se encargaban de dictar y hacer cumplir sus leyes, aparecen tres tipos de policía distintos: la metsuke o policía secreta, la meikashi para las áreas rurales y la okapiki, que ejercían sus funciones en las áreas metropolitanas.

Durante el período de los Shogunatos, existía una especie de dictadura militar sometida al Emperador del Japón. El Shōgun, convertido en General en Jefe de las fuerzas armadas de Japón, tenía el poder militar y político del país, cabe destacar la paz durante el periodo de Tokugawa, también conocido como periodo Edo, (ciudad de Tokio) que trajo un crecimiento importante de la población y el aumento en el empleo de soldados de reclutamiento forzoso, que significaba que las armas -antes posesión exclusiva de los samurai- quedaran al alcance de un cada vez mayor número de personas.

Es en estos momentos en los que crecen los desordenes y la violencia entre la

numerosa población, cuando la policía desarrolla un sistema llamado yaku kobujutsu (técnicas de artes marciales para oficiales). Este sistema ya recogía en una primera parte de las cinco que lo componían, el bojutsu, o técnicas de bastón.En 1924 la policía de Tokio pidió que un grupo de maestros de Bujutsu formaran un comité y repasaran el sistema actual. Cambios que fueron aprobados por la policía e incorporados de inmediato en el sistema policial que entrenaban. Después de la II Guerra Mundial hubo una prohibición en la práctica de las artes marciales, quedando para uso exclusivo de la policía.

Dada la eficacia del sistema de entrenamiento para mantener la Ley y el orden, el gobierno japonés solicitó el permiso de repasar y de desarrollar el sistema actual de defensa personal de la policía. Todas las técnicas anteriores fueron de nuevo estudiadas y el sistema que resultaba se llamó Taiho Jutsu, por lo que éste seria el nombre moderno para el yaku kobujutsu.

Corregidas las deficiencias del anterior sistema tras la investigación y perfeccionamiento que en varios años dedicaron los maestros especialistas convocados de Karate Do, Judo, Aikido, Jo Jutsu y Kendo, y dado el magnífico resultado, el Taiho Jutsu se consideró como el resumen de todas las más prestigiosas artes marciales de Japón.

En la Actualidad se realizan competiciones y exhibiciones de Taiho Jutsu, pero se evita su difusión a nivel masivo, dado su carácter oficial como sistema específico y especial de defensa personal para la policía.

BUJUTSU = TAIHO JUTSU

Sabemos que prácticamente cualquier arte marcial puede proporcionar la base para desarrollar un sistema de trabajo en la labor policial, pero hay estilos que permiten una mejor adaptación de sus técnicas que otros, en la labor policial los golpes deben emplearse fundamentalmente como elemento de distracción y ciertas técnicas mortales deben ser suprimidas, sin embargo las técnicas en las que se aplican diversas palancas a las articulaciones, nos permiten tener un control eficaz sobre la persona agresiva, por lo que los antiguos métodos japoneses de agarre resultan ser muy apropiados.

 Nuestro Taiho-Jutsu forma parte de la práctica diaria en la formación de nuestros alumnos, y es uno de los cinco estilos que establece el Bujutsu de la Sosei, siendo los otros cuatro, el Karate Do, el Tai-Jitsu, el Kobudo y el Iaido. Todos están relacionados entre sí, pero ciertamente el Taiho Jutsu es el más beneficiado pues su desarrollo y evolución se nutre directamente de los otros cuatro estilos.

Además trabajamos con la formación que en defensa personal requieren las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, (Policías Municipales, Autonómicas y Nacionales), así como para Cuerpos de Seguridad Privada, (Vigilantes de Seguridad y Escoltas), y para otros Cuerpos que ostentan el carácter de Agente de la Autoridad, como Agentes Forestales, Funcionarios de Prisiones y Agentes de Movilidad; toda esta formación tiene connotaciones concretas y específicas en cada uno de los Cuerpos mencionados y conforme a la actual legislación se establecen criterios de actuación, nuevos sistemas de trabajo y protocolos en el ejercicio de sus funciones, por lo que se realiza además un trabajo específico con útiles de inmovilización, (grilletes, bridas…) y de protección (defensas y bastones).

SOKE VALCÁRCEL

11ª Generación Shinkyoku-Ryu TaiJitsu

El Taiho Jutsu que practicamos en nuestra Escuela está dirigido por el Maestro D. Jose Antonio Valcarcel Asua, que siendo Soke Heredero de la 10º Generación de Yuichi Negishi, (alumno de Manzo Iwata)

MANZO IWATA NEGISHI YUICHI SHIHAN, es quien desde hace ya más de 25 años comenzó en la Formación específica de distintos Cuerpos Armados.

Concretamente en los años 1983, 1984 y 1985, siendo aún alumno de Yuichi Negishi, es requerido y desarrolla su trabajo como Instructor de Karate, Defensa Personal y Custodia de Personalidades, para el Batallón de Infantería, «General en Jefe Justo Briceño Nº 15”, y en el Comando Regional 1, Destacamento 16, de las Fuerzas Armadas de Cooperación, (Ejercito y Guardia Nacional respectivamente), en la ciudad de Mérida (Venezuela).

A su llegada a España, siendo ya Jefe Instructor y Presidente de la Organización para Europa de la “Japan Karate-Do Sosei-Kai (Shito-Ryu)» y del Estilo Shinkyoku-Ryu Taijitsu, ejerce la Dirección y Organización como Responsable de Seguridad en las Ferias de Madrid con Andalucía en 1.986,

87 y 88. Y de igual modo, durante 18 años será Responsable de Seguridad en actividades de las Fiestas de Getafe, así como en otras actividades públicas organizadas por el Ayuntamiento, desde 1.986 hasta el año 2.004, no sin dejar de prestar, su colaboración y trabajo como Instructor de Defensa Personal en estas Entidades Públicas, así como en la Formación Integral Profesional de Vigilantes de Seguridad impartida a través del Instituto Nacional del Estado (INEM/Plan FIP); pero también desarrollará su trabajo para distintas empresas privadas dedicadas a la Formación de Escoltas y Vigilantes de Seguridad.

De forma simultánea, desde el año 1988 y hasta la actualidad forma parte del claustro de profesores para el Área de Operativa Policial en la Academia Regional de Estudios de Seguridad (A.R.E.S), hoy, Academia de Policía de la Comunidad de Madrid; en actividades académicas de Formación Básica, Actualización y Especialización en las materias de Defensa Personal Policial, Técnicas de Intervención Directa y Preparación Física, fundamentalmente a Policías Locales y Municipales, pero también para las Unidades de Intervención del Cuerpo Nacional de Policía, Vigilantes de Seguridad, Agentes Forestales y Funcionarios de Prisiones.

Es su mayor preocupación seguir de cerca la evolución en la formación que se le

da en Defensa Personal a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en España y así participa en numerosos eventos como, cursos de Protección y Seguridad de Personalidades y Edificios, cursos de Monitor de Tiro, de Conducción y de Policía Judicial, cursos de Técnicas Operativas de Intervención en Inmuebles en situaciones de Crisis, Jornadas Nacionales de Estudio sobre Programación en materia de Defensa Personal Policial, Jornadas Nacionales de Autocontrol y relajación ante el stress profesional de los Miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Jornadas sobre la Delincuencia Internacional y su incidencia en la Seguridad Ciudadana, y Congresos de defensa Personal Policial Nacionales e Internacionales, entre otros.

El Maestro Valcarcel desarrolla el Taiho Jutsu mezclando sabiamente los orígenes de las tradicionales Artes marciales, la experiencia personal en Formación con los distintos Cuerpos de Seguridad y la evolución en el sistema de entrenamiento de la Defensa Personal para la Policía, así otorga suma importancia a los fundamentos básicos de los estilos que siempre practicó y aprendió de su Maestro Yuichi Negishi, la contundencia y seguridad de las Defensas, Atemis y Geris del Karate, la efectividad de los controles, estrangulaciones y luxaciones del Tai Jitsu, la practicidad del Kobudo en el uso del Keibo/bastón y el tai-sabaki del Iaido y sus exactas direcciones de trabajo.

Sus técnicas de esposamiento “Te Jou” son una continua evolución en la búsqueda de la eficacia y rapidez en el “gesto correcto” de la colocación de grilletes.

Sus amplios conocimientos en la aplicación de las luxaciones refuerzan la efectividad en el uso del Keibo/bastón. Es sabido, que el Keibo es el principal útil del Taiho Jutsu, elemento que maneja con habilidad y destreza.

Y quizá el punto más tradicional sea el uso de atados, técnica que desde hace mucho tiempo práctica. “Hojo Jutsu”es la técnica tradicional de atar utilizando el cinturón y/o cuerda como único elemento para ello, fue extraído del entrenamiento del guerrero clásico y el resultado dejaba completamente inmovilizado al individuo.

 Walter Lores Remedios.