Isao Inokuma, mi ídolo.

Isao Inokuma

Estimados Sensei, maestros y practicantes de judo.

El Sensei y arbitro olímpico Héctor Esteves, me envió un video técnico y unas fotos de Isao Inokuma, y telefónicamente me motivo para que escribiera sobre este ídolo y leyenda del judo.

INOKUMA, nació en Yosaka, cerca de Tokio en 1938, se inició en el judo a los 15 años y por su dedicación, su excelente ejecución técnica y audacia, a los 18 ya había obtenido el 4º Dan.

Sus estudios los realizo en la Universidad de Tsukuba y allí fue que decidió dedicarse al judo. Hecho que relato por escrito en la revista, Best Judo.        

Inokuma me contaba, en las largas jornadas de trabajo que tuvimos en la FIJ que él,  «de niño fue más bien enfermizo, pero a su vez,  tenía un gran espíritu y fortaleza mental, y  me aseguró además que yo me hice un propósito y un compromiso a mí mismo de que nunca, me dejaría derrotar por nadie y esa promesa me ayudó mucho en mis aspiraciones y éxitos en el judo nacional e internacional.

 Lo que muy pocos conocen sobre el desarrollo deportivo de Isao Inokuma es que
en sus años juveniles fue discípulo de un Sensei 6° Dan norteamericano, DONN F DRAEGER. Eso fue alrededor de 1957. El maestro lo entreno y lo introdujo en un proceso de entrenamiento, con una planificación y sistematización que incluía una gran preparación física y se utilizaba mucho trabajo con pesas de forma progresiva. Esto le permitió a Isao, ganar una gran fortaleza física y mental. Además de incrementarle su peso corporal y su fuerza, lo cual  fue de mucha ayuda para su Carrera deportiva y sus triunfos.

Hector Esteves y el Autor.

El nacimiento de un ídolo.

En 1959, a los 21 años, Inokuma ganó el Campeonato Nacional de Japón en la división open y se convirtió en el campeón más joven de la historia, en el judo japonés, marca que conservó hasta 1977 cuando un discípulo suyo, Yasuhiro Yamashita a la edad de 18 años, le arrebató esa distinción.

Inokuma cumplió su pronóstico en los juegos olímpicos de Tokio en 1964 en el recién inaugurado BUDOKAN de Tokio ( el templo de las artes marciales) Inokuma alcanzó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos al vencer en la final de la división pesada, al enorme canadiense Douglas Rogers, que pesaba 33 kg más que él y como él me contaba pletórico de orgullo y satisfacción. Todo fue ante la presencia de Hirohito y acotaba, “El Emperador de Japón, que por un día abandonó sus obligaciones para ir al Judo, específicamente para verlo competir a él. A Isao Inokuma, en mi opinión, él lo consideraba su mayor logro.

Inokuma se preparó con vistas al mundial de Brasil para limpiar la afrenta que Antón Geesink le hizo a Japón en Tokio, al ganarle a Kaminaga.

Al año siguiente, en 1965, Inokuma participó en el Campeonato del Mundo de Rio de Janeiro, en la división Open, con la esperanza de enfrentarse al legendario gigante holandés Antón Geesink, que pesaba 40 Kilos más que Inokuma y que el año anterior había roto las aspiraciones y sueños japoneses de conseguir en los Juegos celebrados en Tokio, las (4) medallas de oro que se disputaban en judo, el deporte creado por ellos, al imponerse en la división Open. Pero en Rio de Janeiro Geesink, que el día anterior a la competencia de la división open se había proclamado campeón en la división pesada y había derrotado a los dos judocas representantes de Japón, Sakagushi y Matsunaga solo por decisión arbitral. Pero Geesink sorprendió al mundo del judo, anunciando su retirada del judo competitivo. Geesink, en ese momento estaba en la cima de la fama y la gloria (inteligente verdad). Bueno, esto impidió y frustro a Inokuma al impedirle cumplir su sueño de enfrentarse y ganarle al gigante holandés, en ese mundial. Pero, por otro lado, eso le facilitó el camino para que Inokuma brillara y terminara finalmente proclamándose campeón de la división Open.

La retirada del ídolo.

Isao Inokuma dio por finalizada su carrera deportiva en 1966, con tan solo 27 años. A partir de ahí Inokuma comienza su Vida como directivo y se convirtió en el mánager general del club de judo de la Universidad de Tokai, dedicándose a descubrir nuevas promesas para el judo japonés y convirtiéndose en el entrenador de Noboyuki Sato  quien luego se proclamó campeón del mundo en Salt Lake City en 1967. En 1973 la Universidad lo promovió a profesor jefe de educación física de la  Universidad de Tokai,  y bajo la dirección del Presidente Matzumae, estableció un nuevo departamento de artes marciales que estaba centrado principalmente en el desarrollo y éxito del judo.

Inokuma también Incorporó a Noboyuki Sato, su exdiscípulo y campeón mundial, como instructor en jefe y bajo el liderato de Inokuma se convirtió en el club de judo N. º 1 del Japón por sus resultados.

El trabajo dirigido y ejecutado por Inokuma y Sato, dio sus frutos. Con el dominio japonés en los grandes eventos donde brillaban desde 1973 judokas, a nivel mundial como: Sato. Nakanishi. Hikage. Endo. Saito y Yamashita entre otros.

Inokuma como directivo deportivo fue fundamental en la elección del presidente Shijiyoshi Matzumae. En 1978 Inokuma brindo todo su apoyo, a la campaña para que el Dr. Shijiyoshi Matzumae para que fuera elegido Presidente de la FIJ. Su imagen y labor fueron de vital importancia para que este último, consiguiera la presidencia Federación Mundial de Judo. La cual ejerció desde 1979 hasta 1987. A la muerte de Matzumae, Inokuma heredó de él Dr. Matzumae, la compañía de construcción Tokai Kensetsu, y asumió la presidencia.

Aunque siguió vinculado estrechamente al mundo del judo como apoderado de la Universidad Internacional de Budo y miembro de la Federación de Judo del Japón.

Inokuma fue mi ídolo y mi amigo.

Debo contarles que mi primer encuentro con mi Ídolo Inokuma fue un desastre.

En Puerto Rico hubo una reunión donde se presentaba Matzumae para su candidatura a la FIJ. Y además de él, Esteban, Inokuma, Bunasawa y Takahama. Yo hable a nombre de los presidentes de la América y critique la política de los japoneses. Inokuma se enfureció y se dirigió a mí en japonés, en un tono y unos gestos muy fuertes. Que Matzumae aplaco y le pidió nuestros amigo y abogado  Frank Carbo, de Puerto Rico que le tradujera de nuevo a él, ( a Matzumae mis opiniones ) asimilándolas y aceptándolas y que debían hacerse un cambios al futuro y Takahama intervino a mi favor y esa noche en otra reunión comenzó nuestra amistad, patrocinada por el Sensei Takahama y desarrollada por 8 Años de trabajos juntos en evento de la FIJ.

Inokuma mi amigo acepto la invitación para asistir a Cuba a nuestro evento internacional José Ramón Rodríguez y nos llevó el mejor equipo de judo del mundo dos veces a Cuba, una en Camagüey y otra en Santiago de Cuba, durante mi presidencia. Hecho que yo le agradecí mucho porque le dio un mayor prestigio a nuestro torneo.

Mi amigo Isao Inokuma murió tal y como él era, un japonés de honor tradicionalista del budo, un campeón y un samurái.

El 28 de septiembre de 2001 Isao Inokuma se hizo el Harakiri a muy temprana edad, solo tenía 63 años.

De esta manera terminó con su vida, una de las leyendas más grande del judo

japonés y mundial. Sobre el hecho hay muchas versiones.

Yo tuve el privilegio de presentarme ante su tumba y ofrecerle mis respetos. En el 2011 en un viaje de trabajo a Tokio a una reunión con los presidentes de las federaciones internacionales de SUMO Y KUDO EL Sensei Takashi Azuma máxima figura del Kudo mundial y quien fuera discípulo de Inokuma hasta el grado de  San Dan me informo de su muerte.

Después en otro viaje de trabajo a Japón a una  reunión que asistí en el 2012 me presente en el templo SOGENJI YOKOSUKA donde están sus restos desde el 30 de septiembre del 2001. Allí me presente a prenderle  incienso y dar dos campanadas como es costumbre. Para que supiera de mi visita.

En mi recuerdo y el de todos los que tuvimos el honor de conocerlo quedaron sus grandes victorias nacionales e internacionales, su judo agresivo basado en sus muy efectivas técnicas Tai Otoshi e Ippon Seoi Nage,  sin duda sus técnicas favoritas.

Inokuma un IDOLO Y UNA LEYENDA DEL JUDO MUNDIAL. EPD.

Pedro Chirino Rentería.
Rokudan USATKJ/UPJ