Los Gritos.
Hoy
quiero empezar mi escrito semanal con una frase célebre del Shihan Jigorō Kanō.
“En todas
las formas de entrenamiento, el punto más importante es librarse de los malos
hábitos."
Lo
anterior me da pie para comentar la siguiente opinión.
Yo
considero un mal hábito y falta de recursos pedagógicos, corregir a nuestros discípulos
a gritos o frases fuertes desde la distancia y peor aún en momentos en que ellos
ejecutan sus técnicas y cometen ciertos y determinados errores.
Lo
importante no es gritarles, lo correcto es acercarnos y realizarles una buena demostración
de la manera correcta. Además, muy
importante, sin mencionar o repetir el error cometido. Ejecutando la técnica
con eficacia, eficiencia y estética, para que de esa manera el discípulo no
fije los errores cometidos.
La
experiencia de la vida me ha demostrado que para ser un Sensei, Maestro o
Entrenador, además de conocimientos, hay que ganarse el respeto, el aprecio y
la admiración de los discípulos demostrando el nivel de conocimientos y la maestría,
no con la potencia de la voz.
Eso
de gritar duro, es correcto y bueno para el arbitraje ahí hace falta mostrar
mucha autoridad para premiar o para
castigar las acciones de los competidores. Pero, no sucede lo mismo para el
proceso docente educativo.
Queridos
maestros el reconocimiento y la consideración no se obtiene con GRITOS y mucho menos con insultos o groserías.
Eso se consigue a través de la dedicación y las buenas maneras, enseñando,
ejecutando demostraciones impecables, con respeto y buen trato. Eso es lo que
plantea la PEDAGOGÍA.
Es
por ello que, un Sensei siempre tiene que seguir capacitándose, debe adquirir
los conocimientos y experiencias indispensables, para transmitirlos como
verdaderos maestros y profesores. Eso debe ser en todos los niveles de la
enseñanza ya sea del judo o cualquier otra disciplina.
En
particular yo veo con tristeza muchos que dicen ser "MAESTROS" y se pasan la clase desde fuera del tatami o
en un rincón observando los errores de sus discípulos y gritandoles desde ahí.
¡!!Oye Rene,
eso está mal, no hagas eso, baja la cadera, jala más con la mano izquierda!!!
Pero
no van a su lado a rectificar el error cometido. Es desmotivante. Lo Bueno sería
que, fueran capaces de ir al lado de René, tomar el Uke y demostrarle, cómo
debe hacerse de manera correcta y eficientemente la técnica en cuestión.
Un
profesor es un educador y la educación se demuestra, no se consigue a gritos.
Los
profesores no somos animadores, somos formadores.
Un
profesor de judo, no es un animador de eventos estimulando a gritos a los
participantes. No Señor. El profesor es unos docentes, es un formador, somos
Maestros de la Ejecución y técnica del Judo. Y no solo enseñamos técnicas, sino
que también transmitimos valores y los valores no se gritan, se demuestran y se
proyectan con el ejemplo. Esa es la forma en que se imparte la enseñanza y se
transmite la FILOSOFÍA DEL JUDO Y DEL
BUDO, en todas las Artes Marciales que se respeten.
A
mi juicio sobran ejemplos y puntualizó uno. Hace unos días leí un educativo
articulo del Sensei Justo Noda, y de ahí extraje un párrafo donde el definía lo
que para su concepto es ser, un maestro o un entrenador de judo. Y expresaba lo
siguiente:
“Para mí,
el entrenador debería ser mucho más que eso, debería ser un docente, un maestro
de la pedagogía del Judo. O una virtuosa combinación de ambos roles, cuando se
tengan esos valores entonces sería el maestro o entrenador ideal para la
enseñanza y la práctica del judo."
Fin
de la cita.
Una
magnífica, clara y bien graficada definición.
La
definición del Sensei Noda, cuenta con el respaldo invaluable de toda la
experiencia y sabiduría de un gran profesional. Al que yo puedo certificar, ya
que lo conocí desde, que era un humilde y joven profesor municipal, allá en
Colón en la provincia de Matanzas, y porque lo acompañe en una gran parte de su
exitosa vida deportiva desde sus inicios.
El
Sensei Noda, ha transitado todas las facetas de nuestro deporte, fue atleta,
entrenador de base y provincial, federativo y entrenador y jefe de selecciones
nacionales, masculino y femenino, con resultados Olímpicos en ambos. A lo
anterior, añádale una importante, afición y preocupación por estudiar y
capacitarse como parte de su trabajo. Por ello es un gran Maestro. Un Sensei.
Aplicando
otro pensamiento del Sensei Jigorō Kanō, yo les recuerdo que nos dejó por
escrito, esta otra joya.
"No se
avergüence de un error; cometería una equivocación."
Por
tanto, en esta cuarentena es hora de analizar y corregir nuestra conducta si es
necesario. Porque existe un refrán muy popular que señala.
“Cometer
errores es de humanos, pero, corregirlos es de sabios.”
Conclusiones.
Ahora
que estamos todos en estado de reposo obligado y podemos meditar producto de la
cuarentena. Debemos analizar muy profundamente como es nuestra conducta y
comportamientos encima del tatami, sobre todo con nuestros discípulos para
cuando regresemos a clases, estemos mejor preparados. Ya sea para entrenarlos o
formarlos. Esa debe ser la visión y es nuestra misión.
Ojalá
coincidan conmigo
Pedro
Chirino Rentería
Rokudan USATKJ/UPJ
Rokudan USATKJ/UPJ
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